La computación cuántica permite simular interacciones moleculares a escala cuántica, reduciendo significativamente el tiempo y el esfuerzo necesarios para descubrir nuevos medicamentos. Al ofrecer una visión más precisa del comportamiento de sistemas biológicos complejos, ayuda a los investigadores a identificar candidatos prometedores con mayor rapidez, acelerando así el desarrollo de tratamientos eficaces. Además, la detección cuántica mejora la precisión en la obtención de imágenes de biomoléculas, lo que facilita la comprensión de los mecanismos de las enfermedades y el desarrollo de fármacos dirigidos.
